Cuando el CAPITAL prima sobre el TRABAJO...

Así pensaba el partido socialista hace no muchos años, fue necesaria una fortísima campaña de propaganda para que la gente abandonara esas ideas. Se han creado un sin fin de necesidades artificiales de forma que las personas nos empeñamos en satisfacerlas cada cual por nuestro lado, aisladas unas de otras.
Hoy he soñado que esas ideas vuelven, y que se formaba una fuerte corriente favorable a la redemocratización de la sociedad, la economía, las relaciones sociales, y que de forma imparable apostábamos por un poder que no se considere obligado a rendir cuentas a nadie. Este movimiento se hacía cada vez más grande y los poderosos se veían obligados a recurrir a la fuerza para acabar con el.
Estallaba entonces la revolución.
¡¡VIVA LA REVOLUCIÓN DEMOCRÁTICA!!
¡¡ABAJO LA TIRANIA DEL CAPITAL!!
¡¡ABAJO LA TIRANIA DEL CAPITAL!!
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